El restaurante rondeño Bardal de Benito Gómez sigue siendo el buque insignia de la Serranía de Ronda en la guía Michelin que este martes celebró su gala anual en Murcia. Consolidado como uno de los referentes de alta conocida española renovó sus dos estrellas y se mantiene en ese selecto club de la famosa guía francesa que hace que muchas personas acudan a los locales que aparecen en sus recomendaciones.Además, junto al marbellí Skina, son los dos restaurantes que cuentan con una mayor distinción de Michelin en la provincia de Málaga.
Hasta ahora Bardal era el único restaurante de la comarca con estrellas, aunque, desde este año, está acompañado por el Mesón Sabor Andaluz de Pedro Aguilera en Alcalá del Valle que recibió su primer brillo. Una estrella que tras la reforma de su local y el cambio en el concepto de trabajo muchos predecían y que ha terminado llegando.El chef compartió con todo su equipo este logro que hace que una pequeña región como la Serranía cuenta en estos momentos con tres estrellas Michelin.
Una estrella que se vivió también con especial intensidad en Cuevas del Becerro, localidad en la que está radicada Extiercol, la huerta de la que procede buena parte del producto con el que trabaja a diario Aguilera para confeccionar sus dos menú degustación.
El mundo Michelin de la comarca también cuanta con dos Bib Gourmand para Platero & Co (Gaucín) y La Tarara (Olvera). Y es que la propia guía engloba todos estos restaurantes dentro de la zona de Ronda para ofrecer a sus seguidores los existentes dentro de su radio de proximidad.
A ello se suma la recomendación para Tragatá Ronda, el local más desenfadado de Benito Gómez que también se consolidó dentro del listado que los inspectores de la guía consideran que tienen una cocina de calidad a precios contenidos.
Y aunque no se encuentra en la Serranía, también llegó la entrada en esta misma categoría de Tragatá Málaga, el primer proyecto de Gómez fuera de la ciudad del Tajo y que se abrió el pasado verano.